Cotidianamente
escucho que las parejas en conflictos pueden resolver sus inconvenientes solos,
puede que esto hasta cierto punto resulte cierto cuando la situación que genera
el malestar es algo ligero, poco frecuente o existe un alto nivel de comunicación
y capacidad de alcanzar acuerdos en cada uno de los miembros de la relación,
así y solo así es posible que los miembros de la pareja resuelvan solos lo que
aflige a la relación o a uno de sus miembros en particular, caso contrario se
hace necesario la intervención externa, alguien que medie la situación y sirva
de conciliador entre las partes.
La familia de los miembros de la pareja suelen
jugar el papel de mediadores cuando la capacidad interna de la relación no
posee la capacidad de auto regularse por sí sola, es uno o algunos de los
parientes o amigos más cercanos de uno o de ambos que es consultado o sirve de
juez o jueces, situación que en mas ocasiones complica las cosas, aunque exista
la buena disposición y voluntad para prestar ayuda en los conflictos de la
pareja, regularmente no están preparados para mediar en situaciones complejas
como los conflictos de pareja, esto hace que los niveles de estrés en lo
individual o de ambos se incrementen.
En tercer lugar están los especialistas
externos a la pareja y la familia de los miembros de la relación, los
terapeutas son una necesidad que se crea a partir de los múltiples y complejos
conflictos que se pueden presentar en las relaciones de parejas, las áreas
sexuales, comunicacionales, los roles parentales, el establecer límites
adecuados y el ejercicio de poder en el interior de la relación son entre
muchas las situaciones que hacen necesaria la asesoría a las que las parejas
que quieran en algunos casos, rescatar su relación, mejorarla, terminarla en
buenos términos o en casos extremos de violencia, recuperar la autoestima de la
pareja y la familia, mas aun cuando existen hijos en la relación de pareja.
Lo
importante de destacar, es que si no se generasen conflictos y fricciones
innecesarias en las relaciones de pareja, no es necesario que existamos los
terapeutas, habría un mundo sin violencia y el amor florecería entre nosotros,
esperemos que en algún momento histórico no necesiten de nosotros y las parejas
ya no asuman que deben tener problemas como una normalidad, y que lo normal en
las parejas sea: Amarse y compartir cada uno su felicidad con la otra persona
que decimos amar.
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Autor: Gino Escobar
Tobar
Contacto con el Autor:
Email: ginokevi@yahoo.com
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