Con
responsabilidad y Amor
Esta es una
frase que utilizó para describir lo que algunas personas conocen como libertad
o libre albedrío, es una de las tantas formas que podríamos interpretar, la
realidad es que es una expresión que solía utilizar mis ancestros para cuando
perdían la paciencia o se salían de equilibrio por no poder hacerse entender y querían manipularme cuando niño y terminaba expresando: “entonces has lo que
te de la gana”. Pero una amiga me dijo en algún momento que esa frase sonaba subversiva
al yo expresarla y más cuando concluía alguna entrevista sobre sexualidad,
dicho comentario me invito a meditar en aquello y compartir dichas reflexiones.
¿¿¿Sera que la
libertad es la mayor forma de subversión???, y como se llega a secuestrar
nuestra identidad y someternos a las formas prediseñadas de comportamientos
donde a veces tenemos que vivir obligándonos a soportarlas aun a costa de
nuestra estabilidad emocional; el respeto a los diseños sociales hace que más
de una ocasión tengamos que anteponer nuestros sentires y pensares por sobre
los legados y creencias, de esta forma aprendemos a irrespetarnos en nombre del
respeto a lo que “debería ser” según dicen los que “nos aman”, esto hace que nuestros gustos se conviertan en
caprichos y estos se tornen en apegos que desarrollan un sentido de necesidad o
dependencia tan fuerte que el intentar abandonarlos es algo complicado y hasta
se puede sentir que nos estamos despersonalizando, pero más que un problema es
la forma social de vivir de los problemas como gratificación por encontrar
soluciones, y así sufrimos al intentar hacer lo que creemos correcto por sobre
lo que sentimos que es lo correcto para nosotros aunque no les agrade a los
otros.
El hacer lo que
nos dé la gana es algo paradójico, nuestros padres o maestros en un juego
educativo manipulativo nos dicen que podemos hacer lo que queramos, siempre y
cuando no nos sobrepasemos a las normas y reglas preestablecidas o por ellos
diseñadas, esto resulta muchas veces contradictorio y confuso en el cerebro en
desarrollo ya que en un alto porcentaje dichos aprendizajes y consignas no
vienen acompañadas de coherencia entre lo que se dice o hace de parte de
quienes se “supone” sean quienes formemos las nuevas generaciones, y esto hace
que entremos en procesos de desgaste de lo que se llamaría libertad. Ser libre
y hacer lo que nos dé la gana, ¿¿¿quién puede hacerlo??? ¿¿¿Quién hace lo que
piensa y asume las consecuencias de lo que suceda??? . En ello vamos a encontrar
oportunidad para respondernos el que hace que en los actuales momentos aun
estemos discutiendo esquemas punitivos de educación y reeducación. Hay una
frase que me invita a encontrar la senda de la libertad acompañada de
responsabilidad con el amor que poseo en mí, para compartirlo con los demás;
sin entrar en conflicto con las creencias anteriores, se podría decir que: “EL
AMOR ADVIERTE MIENTRAS QUE EL MIEDO AMENAZA”
De lo antes
expuesto dejamos la puerta abierta a el inicio del camino de encontrar nuestra libertad
sin el malestar de las reglas rígidas, ya que cada uno puede ponerle su toque y
así generar lo que conocemos como cocrear o coconstruir nuevas realidades, esto
no descalifica lo que nuestros antepasados nos legaron, sino que permite
evolucionar sin generar violencia entre nosotros por no “obedecer”, es
permitirnos desde nuestra consciencia acoger que comportamientos normas y leyes
vamos a acoger y vivir sin sentirnos obligados sino como algo connatural nuestro. Una vez escrito si parecería un tanto
subversivo esto de repetir que hagan lo que les dé la gana con responsabilidad
y amor, pero la realidad no es más que una forma de evidenciar lo que ya
hacemos pero no lo reconocemos de manera consciente porque suena cual muchachos
majaderos que no “obedecen” los designios de sus amos o tutores, la realidad es
que todos hacemos los que nos da la gana o consideramos que está bien, solo que
cuando nos sentimos descubiertos, justificamos y argumentamos para defender
nuestra integridad frente a la validación social de nuestro ser y parecer, así
solo de manera consciente es que vamos a hacernos responsables de la realidad
compartida donde el uso de la voluntad consciente con amor nos permite vivir de
manera equilibrada.
Para no
incomodar a quienes por años se han encargado de hacer creer a la humanidad que
su sentido de autoreconocimiento descansa en la aceptación social y su sentido
de pertenencia está en que sea reconocido por su entorno, en parte si es así,
pero no de manera absoluta, así es como se ha manejado en occidente para que
nadie haga uso de su voluntad y libertad, eso atentaría al sistema establecido,
de ahí que la autoestima se la ha orientado más a la forma en que los demás nos
perciben más que al fondo de nuestra propia autopercepción cuestionando los
aprendizajes sin dejar de amar a quienes nos los enseñaron, en mi expresión lo
que pretendo compartir es que se den la oportunidad de despertar su consciencia
y voluntariamente hagan lo que decidan sin tener que responsabilizar a quienes les
enseñaron o manipularon (que son corresponsables de nuestras majaderías en gran
parte), sino que asumamos las consecuencias de lo que pensamos, decimos,
hacemos y sentimos, dejando de sentirnos traidores de nuestras tradiciones y
convirtiéndonos en gestores de nuevas formas de vida y comportamiento tomando
de nuestros padres y ancestros lo más saludable y dejando en el tiempo pasado
lo que no colabora a mejores formas de convivencia y de expresiones afectivas
de manera efectiva, tomar el poder del amor como la mejor excusa para vivir.
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Autor: Gino Escobar Tobar
Contacto con el Autor:
Email: ginokevi@yahoo.com
Twitter: https://twitter.com/GINOBUDISTA
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